Salpicaderos y paneles de pared de la cocina
El salpicadero es un material que cubre la pared de las cocinas. Se instala entre la encimera y los muebles de la parte superior de la cocina. Además de proteger las superficies, este revestimiento contribuye a dar carácter y estilo a tu hogar. Es un elemento central del diseño de la cocina, ya que ayuda a completar el estilo. Por lo tanto, es importante tomarse un tiempo para escoger.
Escoge un panel de pared de cocina funcional
El salpicadero es, ante todo, un elemento funcional. Facilita en gran medida la limpieza de la cocina, aunque, para que así sea, es muy importante escoger bien los materiales. Un panel de estratificado o de vidrio es extremadamente fácil de limpiar. Basta con pasar un paño para quitar las salpicaduras que puedan originarse mientras cocinas. Algunas personas piden colocar el frontal en las partes de la pared donde se encuentran la placa de cocción y los electrodomésticos.
Otra posibilidad es instalar un salpicadero de cocina solo en una parte de la pared. Algunos paneles, parecen rodapiés, y dan continuidad a la encimera de punta a punta. Están hechos de los mismos materiales –de estratificado, en la mayoría de los casos–, pero también pueden ser de cerámica, granito, madera u hormigón. Estéticamente, aportan un toque refinado a la cocina. Sin embargo, protegen un poco menos de las salpicaduras, ya que son más bajas.
Si optas por este tipo de salpicadero de cocina, puedes completarla con un panel de acero inoxidable o de vidrio templado detrás de la placa de cocción. Así protegerás la pintura. Por otra parte, este tipo de panel de pared está especialmente recomendado en las zonas de la cocina que están expuestas a variaciones de temperatura. Así ocurre en las paredes de detrás de las placas de cocción. Estos materiales resisten al calor y, por lo tanto, son más seguros.
¿Qué tipo de revestimiento de pared de la cocina debes escoger?
El estratificado: universal
El panel estratificado es una opción muy actual, ya que presenta muchas ventajas. Este panel de pared de cocina es fácil de montar, se corta fácilmente, y está disponible en muchos colores y efectos. En función de tus preferencias, tendrás a tu disposición el efecto madera, hormigón, piedra, loza, metal, etc. Se adapta a todos los estilos de cocina completa. Ofrece una excelente relación calidad-precio, además de una buena resistencia, y podrás conservarlo durante muchos años. Es muy fácil de limpiar: un poco de agua y jabón, un paño... ¡y listo!
Panel de cuarzo:
Tiene un acabado similar a la piedra, por lo que es muy fácil de limpiar. Cuando está bien combinado con la encimera, aporta un toque de lo más elegante.
Panel de cerámica:
En este caso, también ofrece el aspecto de piedra natural y fácil de limpiar. La cerámica ofrece más resistencia al calor y puede instalarse sin problemas cerca perfectamente de una placa de cocción de gas.
Panel de acero inoxidable:
Un gran clásico, el acero inoxidable recuerda a la cocina de los profesionales y se utiliza mucho por lo fácil que resulta limpiarlo y la resistencia que ofrece, especialmente al calor. Es muy habitual encontrarlo detrás de las placas de cocción a gas.
Panel de vidrio lacado:
Con un acabado muy sobrio y de diseño, Schmidt propone el panel de vidrio lacado en colores neutros como el blanco, el gris o el magnolia. Su limpieza no supone ninguna dificultad.
Panel de vidrio estampado:
Aquí estamos en el caso contrario, si buscas un estilo rotundo, el panel de vidrio estampado te conquistará con esta colección tan actual: estampado de metro parisino, geométrico, de baldosas hidráulicas, etc.
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Otros tipos de revestimientos de paredes (fuera del catálogo de Schmidt) :
Azulejos de pared:
La loza es un material clásico y muy popular. Si se coloca de forma adecuada, tiene un acabado elegante y refinado. Encontrarás muchas posibilidades y colores en todas las tiendas bricolaje. Si tienes una cocina clásica, escoge colores sobrios o, al contrario, con un toque original, para conseguir un estilo más contemporáneo. Los azulejos estilo metro parisino se han puesto de moda estos últimos años. No solo los existen en blanco, si no que ahora están disponibles en una gran variedad de colores. Si no consigues decidirte, esta es una opción segura.
Revestimientos, una alternativa económica:
Si tu presupuesto es algo más limitado, existen materiales más accesibles y con una calidad más que correcta. Una vez instalados, ofrecen un efecto muy bonito. En las tendencias de decoración, a menudo se habla de las plaquetas de revestimiento. Son fáciles de instalar y limpiar. Existen muchos de estilos y formas. Algunas son adhesivas, lo que gusta especialmente a los menos manitas. Y la ventaja es que se despegan fácilmente. Si te cansas de ellas, es muy fácil cambiarlas.
El enlucidos para los más hábiles:
El enlucido de cemento de hormigón también es una magnífica alternativa. Sin embargo, la técnica de instalación requiere ciertas aptitudes manuales. No te lances por tu cuenta sin seguir todas las indicaciones. Podrías perder tiempo y dinero. Si estás seguro de tu destreza, el acabado será impecable y darás un estilo industrial o moderno, en función de la cocina y los muebles.
Con los paneles de paredes de la cocina, ¡todo es posible!
Según el color de la cocina, puedes ser más original con los tonos del frontal. Si los muebles están en una gama monocromática blanca, un color cálido puede aportar un toque más dinámico. Todo es posible con un panel de pared, tú decides si quieres que sea más llamativo o más discreto. También puede hacerlo práctica y útil, optando, por ejemplo, por revestimientos magnéticos o de pizarra. Todo depende de lo que prefieras, simplemente tendrás que escoger.
Piensa que el panel de pared es algo que se puede cambiar fácilmente. Si inviertes en una cocina, es para conservarla unos años. Sin embargo, el panel o el salpicadero es algo distinto. Puedes encontrar revestimientos a un precio asequible, lo que te permite cambiarlo cuando quieras. Ya sabes... Puedes rejuvenecer fácilmente la cocina con uno nuevo frontal.
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